
La laminación es un procedimiento de conservación-restauración aplicable a aquellos documentos que se encuentran especialmente debilitados y su manejo puede causar daños al soporte. Consiste en aplicar un refuerzo de papel (generalmente papel japonés o tissue) a la obra principal por una o ambas caras para recuperar la consistencia y la funcionalidad perdida (consolidación). Existen dos procedimientos de laminación: laminación manual y laminación mecánica.
La laminación no debe ser utilizada de manera indiscriminada, solo debe aplicarse a aquella documentación que presente un estado de conservación tan friable o quebradizo que no pueda ser corregido mediante métodos de restauración menos invasivos.